El Monte Abantos es una de las señas características de los escoriales. De El Escorial de abajo y del de arriba. Una notable montaña de la Sierra de Guadarrama que, sin duda, forma parte indisoluble, con premiso del Monasterio, del skyline de ambas localidades y protagoniza no pocas fotos.

Origen del Monte Abantos

Estrechamente relacionado con los procesos geológicos que han dado forma a esta región a lo largo de millones de años, la formación del Monte Abantos se remonta a la era geológica del Terciario, más concretamente al período del Mioceno, que abarca desde hace aproximadamente 23 millones de años hasta hace unos 5 millones de años atrás. Durante este período, la actividad tectónica en la región fue intensa, dando lugar a la elevación de las cordilleras y la formación de las montañas que conocemos hoy en día.

El Monte Abantos se formó principalmente como resultado de los movimientos tectónicos que elevaron la corteza terrestre en esta región. Los procesos de plegamiento y fracturación de las capas de roca durante estos movimientos tectónicos contribuyeron a la elevación gradual de la Sierra de Guadarrama, incluido el Monte Abantos.

La Sierra de Guadarrama es el resultado de la colisión entre las placas tectónicas Euroasiática y Africana. Este choque de placas generó fuerzas compresivas que provocaron el levantamiento de la corteza terrestre y la formación de la cordillera. A lo largo del tiempo geológico, la erosión causada por agentes naturales como el viento, el agua y el hielo ha modelado la superficie de la montaña, creando sus características actuales.

El Monte Abantos, con una altitud aproximada de 1.753 metros sobre el nivel del mar, destaca como una de las cumbres más prominentes de la Sierra de Guadarrama. Su geología incluye una variedad de rocas metamórficas y graníticas que han sido moldeadas por millones de años de actividad geológica y erosión.

Además de su importancia geológica, el Monte Abantos y la Sierra de Guadarrama en general son áreas de gran valor ecológico y paisajístico. Están protegidas como parques naturales y reservas naturales debido a su biodiversidad y a la presencia de ecosistemas únicos que albergan una amplia variedad de flora y fauna.

Flora y fauna del Monte Abantos

La Sierra de Guadarrama, incluyendo la zona alrededor del Monte Abantos, es una zona protegida y designada como Parque Nacional y Reserva de la Biosfera.

La zona que rodea al Monte Abantos, El Escorial y San Lorenzo de El Escorial, alberga una rica diversidad de flora y fauna, característica de los ecosistemas de montaña mediterránea.

Entre la flora típica que podemos observar fácilmente en torno al Monte Abantos:

  • Pinares y bosque mediterráneo: La vegetación predominante incluye pinos carrascos, pinos resineros, encinas y quejigos. Se trata de árboles se adaptan bien a las condiciones climáticas y de suelo de la región.
  • Robledales: En áreas más húmedas y frescas, es común encontrar robles melojos, especialmente en las laderas orientadas al norte y en los valles donde hay mayor humedad.
  • Matorral y Arbustos: Junto con los árboles, el matorral mediterráneo es abundante. Plantas como el tomillo, el romero, la lavanda, la jara y la retama son comunes en la región.
  • Vegetación de Ribera: Cerca de arroyos y cursos de agua, es posible encontrar sauces, fresnos y álamos, así como cierta diversidad de plantas acuáticas y helechos.

Fauna en el entorno del Monte Abantos

  • Aves rapaces: La Sierra de Guadarrama es hogar de una variedad de aves rapaces, incluyendo el águila imperial ibérica, el buitre leonado, el halcón peregrino y el cernícalo. Un espectáculo que, si prestamos atención, no es difícil presenciar si miramos con atención al cielo.
  • Mamíferos: Entre los mamíferos presentes en la zona se encuentran el ciervo, el jabalí, el zorro, el tejón y el gato montés, así como diversas especies de roedores y murciélagos.
  • Anfibios y teptiles: Los lagartos, las culebras y las víboras son algunas de las especies de reptiles presentes en la región, mientras que en los arroyos y charcas se pueden encontrar sapos, ranas y tritones.
  • Insectos: La diversidad de hábitats también alberga una amplia variedad de insectos, incluyendo mariposas, escarabajos, abejas y avispas… (y todo ello sin hablar de todo lo que puedes ver en el Centro de Naturaleza Insectpark, situado a pocos kilómetros del Monasterio de San Lorenzo de El Escorial).